El rincón del Viejo Canalla

MANOLO JUAREZ CUARTETO. Untrafon 10.

La música folclórica argentina no ha contado a lo largo de su historia con demasiados músicos renovadores, esto es, aquellos que rompen con los moldes establecidos. Esa menguada lista incluye los nombres de los recordados Eduardo Lagos, Chango Farías Gómez y Waldo de los Ríos, el hoy olvidado Quique Strega y, por supuesto, Manolo Juárez. Sigo teniendo presentes los memorables conciertos que décadas atrás ofrecían en Los Altos de San Telmo, Manolo y el  Chango con diferentes acompañantes (Marian Farías Gómez, Jorge Cumbo, Alejandro Santos), y también los primeros discos del pianista en el sello Music Hall (Trío Juárez, Trío Juárez + 2). Manolo fue desde esos lejanos tiempos –sin abandonar nunca las raíces de nuestra música folclórica- un instrumentista esencialmente moderno, de una prodigiosa técnica y con una formación clásica que también abrevaba en el jazz, lo que le permitió siempre desarrollar creativas improvisaciones y variaciones sobre temas conocidos y también aportar novedosas ideas como la de su Chacarera sin segunda, una obra que podía tener diferentes duraciones, de acuerdo a cuando y con quien se la interpretara. A lo largo de cuatro décadas Manolo Juárez grabó una decena de discos, como solista, en dúos y con diferentes formaciones en los que incluso coqueteó con los teclados eléctricos, aunque su instrumento (no casualmente ha vuelto a él en sus últimos trabajos) es, sin duda, el piano acústico. Este reciente CD en el que está acompañado por Roberto Calvo en guitarra, ese contrabajista extraordinario que es el Mono Hurtado y Colo Belmonte en percusión, lo muestra fiel a sí mismo, pero constantemente renovado, algo que se puede apreciar en sus recreaciones de varios temas que ya había grabado en aquellos primeros y legendarios trabajos. Esto se puede apreciar en las nuevas versiones de la cueca Remolinos expuesta con amplias improvisaciones, la chacarera La loca, de Andrés Chazarreta, con un gran solo de Belmonte en percusión, otra antigua chacarera La vieja, con notable trabajo del Mono y expresivas variaciones del piano y Luna tucumana, tal vez la más “respetuosa” del original. Pero también hay versiones novedosas, como la las chacareras La doble, con una introducción casi sinfónica y Horno de barro, con un notable solo de arco en el contrabajo del Mono. La cueca La arenosa está “ralentada” en su tempo y en la Zamba de los mineros, el piano de Juárez  es un acople perfecto para la voz de Néstor Basurto, único invitado del disco. Y hay también dos solos del pianista, una lírica interpretación de la Manuelita de María Elena Walsh y el Momento n° 1, un aire de zamba que cierra este excelente disco. Un CD que muestra a un Manolo Juárez absolutamente vigente y en la plenitud de su creatividad y lo ratifica, por si hacía falta, como una de las figuras fundamentales de la música folclórica nacional de las últimas décadas. Jorge García.

 

 

 

SILVIA JUAN BENNAZAR. Las hojas tienen mudanza. Edición independiente.

Como ocurre con varias de las cantantes del género de la nueva generación, Silvia Juan Bennazar no comenzó cantando folclore; fue su encuentro con Lorena Astudillo, figura consular de nuestra música folclórica, lo que la decidió, afortunadamente, a volcarse en ese terreno. Poseedora de una voz privilegiada y de variado matices, perfecta afinación, preciso fraseo y una elevada dosis de expresividad, en su primer trabajo está acompañada de un grupo de talentosos músicos que no son ajenos a los resultados finales del disco. Con una formación básica integrada por Juan Pablo Ferreyra en guitarra- también responsable de la mayoría de los muy atrayentes arreglos en los que se conjugan a la perfección tradición y modernidad-, Tati Calá en bajo y Matías Furió en percusión a lo que se agregan numerosos invitados, la cantante desarrolla un programa integrado por temas de compositores no demasiado difundidos (como el talentoso Néstor Soria, de quien interpreta cuatro piezas), alguna obra tradicional y un par de títulos de grandes autores latinoamericanos. No es fácil en un disco de tan pareja calidad resaltar preferencias, que quedarán a disposición de la sensibilidad personal de cada oyente, pero no esquivaré el bulto y señalaré mis highlights personales. Silvia es una gran intérprete de zambas y las tres que figuran en este disco están entre los mejores momentos de la placa, tal el caso de Lavandera chaguanca, en un sensitivo dúo con ese gran pianista que es Pablo Fraguela, Hermógenes Cayo, de Cecila Gauna, con destacada participación vocal de Claudio Sosa y la bellísima Zamba del arribeño, de Juan Falú y Soria. Otras excelentes versiones son la del aire de gato El niño, de la inspirada pluma de Sebastián Monk, en la que esta solo acompañada de la guitarra de Ferreyra y los clarinetes de Emiliano Alvarez, el huayno que da título al CD, recopilación de Leda Valladares, otra bella canción de Néstor Soria, Trampero y monte, que cuenta con un excelente arreglo “camarístico” para cuerdas y vientos y la emblemática Volver a los 17, de la gran Violeta Parra. Son muchos los discos que se editan a lo largo del año de nuevos intérpretes pero son muy escasos los que permiten elogios incondicionales. En este caso, es menester ser rotundos y afirmar que este debut de Silvia Juan Bennazar está entre los más impactantes que se han producido en los últimos tiempos en el prolífico terreno de la música folclórica. Jorge García.

 

 

 

ESCALANDRUM. Vértigo. Epsa 1542.

No es común que un conjunto que se caracteriza por la permanente búsqueda de la renovación de su música y su sonido se mantenga unido a lo largo de catorce años prácticamente con la misma formación (el único cambio es, luego de su primer disco, el reemplazo de Guido Martínez en el contrabajo por Mariano Sívori). Integrado por Damián Fogiel en saxo tenor, Gustavo Musso en alto y soprano, Martín Pantyrer en saxo barítono y clarón, el notable pianista Nicolás Guerschberg, responsable además de los creativos arreglos, el mencionado Sívori y las impresionante potencia rítmica de la batería de Daniel “Pipi” Piazzolla, el sexteto Escalandrum es una formación inclasificable ya que en ella se pueden apreciar influencias del tango, los ritmos folclóricos, la música clásica y el jazz (apreciable en las constantes improvisaciones que se desarrollan en sus temas) y que se ha consolidado como uno de los grupos esenciales de nuestra música, logrando conciliar el rigor y la ausencia de concesiones comerciales con una creciente popularidad, algo que le ha permitido, vg, ganar el año pasado el Gardel de Oro, con su disco Play Piazzolla, poder actuar en grandes teatros y realizar exitosas giras por diferentes países del mundo. Este séptimo trabajo, el primero grabado en vivo (en Boris Club), permite captar en plenitud la espontaneidad e intensidad de su música. Cinco de los ocho temas pertenecen a Guerschberg y tres a Fogiel y en ellos se puede percibir el talento como compositores de ambos músicos y la capacidad de los integrantes del grupo, tanto en los riffs de los vientos como en su labor de solistas. Así en Ostinado hay un excelente solo de Damián Fogiel y el tema que da título el disco comienza con un estilo “tangueado”, pero pronto deriva hacia un enjundioso tono jazzístico con brillantes intervenciones de Musso en soprano y Guerschberg en piano. Insomnio es un tema obsesivo en el que destaca una cadenza de Pantyrer en clarón, mientras que Cumulus limbus es una obra de compleja estructura con lucimiento de Fogiel y Sívori en el contrabajo. Nocturno es un título de tono introspectivo en el que destaca el alto de Musso y en Pata de elefante es Fogiel otra vez quien se luce. En Variaciones para sexteto, hay una perfecta interacción de los vientos, mientras Angulos, que cierra la placa es una obra en la que el piano de Guerschberg muestra aristas casi expresionistas y hay un brillante solo de Pantyrer en barítono. Un nuevo CD de Escalandrum que confirma el enorme talento de estos músicos y la vigencia de un conjunto que se resiste a ser encuadrado dentro de ningún género musical. Jorge García.

ESCALANDRUM PRESENTARA ESTE DISCO EL 29 DE JUNIO A LAS 21 HS. EN LA TRASTIENDA, DEFENSA 460.

 

 

 

ANGEL DE BOLSILLO. Canciones de Sebastián Monk, Libro-disco, Ediciones La Tribu.

 Si existe una figura que se podría llamar de “culto” entre músicos y melómanos esta es la de Sebastian Monk. Talentoso juglar y poeta, enorme músico, prematuramente desaparecido, si bien su obra está mayoritariamente  dedicada al universo infantil, también hay en ella temas dedicados a los adultos y las sorprendentes piezas que integran este libro-disco a las que denominó en algún momento “canciones para niños para ser escuchadas sin la presencia de los niños”. Lujosa edición, imaginada por Alejandro Simonazzi, conductor del programa Revuelto Gramajo, a partir de una conversación que sostuvo en 2011 con Sebastián, en este trabajo el CD acompaña a un hermoso libro en el que las letras del poeta están ilustradas por talentosos dibujantes que trasmiten a través de sus pinturas el espíritu de cada uno de los temas y hay también una conmovedora semblanza de Luis Pescetti. Por supuesto que la preferencia y la conexión con cada pieza estará directamente relacionada con la sensibilidad de cada oyente, ya que todos los textos de Sebastián están impregnados de ternura, humor, ironía y una ocasional melancolía que les otorga en varios casos, un peculiar tono agridulce. Pero además, Sebastián Monk fue un gran compositor, algo que se puede apreciar en la riqueza melódica de los distintos ritmos nacionales y latinoamericanos sobre los que se desarrollan las letras. Y si a ello la sumamos la presencia de una gran cantidad de talentosos músicos y cantantes, el resultado no puede estar por debajo de la excelencia. El primer tema, que da título a la edición, es un tierno vals que permite escuchar la voz y el piano de Sebastián, con destacada participación del siempre bienvenido Franco Luciani en armónica. Dentro de una selección de un gran nivel, voy a señalar entre mis highlights personales el tema antes mencionado,  la zamba Yo quería llamarte Paloma, cantada por Teresa Parodi, el candombe Juana y Mateo, interpretado por el uruguayo Alejandro Balbis, el dulcísimo gato El niño, a cargo de Luna Monti y Juan Quintero, las Coplitas violetas en un gran arreglo vocal a capella del trío Aymama y dos hermosas nanas, Canción de Puna para mi Juli, por Micaela Vita en voz y Willy González en bajo y bombo y Tonadí, cantada por Silvia Iriondo con el acompañamiento de Marcos Cabezas en vibrafón. Además también, al final del CD, hay un emotivo video. Una excelente edición y un merecidísimo homenaje a un poeta y compositor de primer nivel, que excedió ampliamente el limitado rótulo de autor de canciones para niños. Jorge García.

ANGEL DE BOLSILLO SERA PRESENTADO EL 3 DE JULIO A LAS 20 HS. EN EL AUDITORIO DE RADIO NACIONAL CON ENTRADA LIBRE Y GRATUITA.

 

 

 

GISELA FARIAS. Sings Elvis. Edición independiente.

En ocasión de comentar en este mismo espacio el CD debut de Gisela Farías, Gotas de jazz, mencionábamos su atractiva voz y la frescura de su fraseo, apreciable principalmente en las baladas y los tiempos medios. En este segundo trabajo, la cantante ofrece un interesante cambio de rumbo en su homenaje a Elvis Presley, posiblemente el primero que se le haga al vocalista por parte de una mujer. Acompañada por Luis Bianco en piano, responsable de los atractivos arreglos, Diego Lastres en armónica, Federico Rey en bajo y Mariano Casanovas en batería, Gisela recorre varios de los hits del ídolo, a los que les otorga, sin que los temas pierdan su esencia, una impronta claramente jazzística. Así puede aparecer vibrante y enjundiosa en sus interpretaciones de Heartbreak Hotel, It Hurt Me y Can´t Help Falling in Love y lírica e introspectiva in A Mess of Blues y Love me Tender. Uno de los mejores momentos del disco los consigue en su versión de Hound Dog, que comienza con un dúo de la vocalista con la armónica y desemboca en un poderoso swing. Un segundo CD de Gisela Farías en el que ratifica sus interesantes condiciones como cantante, que no solo será apreciado por los fans de Presley sino también por los amantes del jazz. Jorge García.

GISELA FARIAS PRESENTARA ESTE DISCO EL 13 DE JULIO A LAS 21.30 HS.EN LA DAMA DE BOLLINI, PASAJE BOLLINI 2281.

 

 

 

MR. VERTIGO. Demasiada agua. Edición independiente.

Confieso que hasta hace más o menos un año no conocía a Marina Ruiz, pero mi primer encuentro con ella, acompañando a la cantante Luciana Jury, me provocó la sensación que estaba ante una instrumentista fuera de serie. El verla en sucesivas presentaciones me ratificó ampliamente esa impresión, ya que pude apreciar a una talentosa pianista de una gran técnica, una notable ductilidad, que le permite moverse con la misma comodidad en los terrenos del jazz, del tango o del folclore, y una poderosa digitación que no parece compatible con su menudo físico. Esos atributos se pueden apreciar en este disco en el que también aparece como una competente compositora y –aunque no figura el dato- arregladora. Con la permanente compañía del bandoneonista Leandro Ragusa, su compañero de la música y la vida, también autor de un par de temas, más la presencia de varios jóvenes y capacitados músicos, a través de distintas formaciones, dan cuerpo  a un  proyecto en el que se integran con solvencia, influencias de distintas vertientes, tales como el tango (cortesía de Ragusa), el jazz, presente en las abundantes improvisaciones, los ritmos folclóricos nacionales, ríoplatenses y brasileños y la música clásica de cámara. Así se puede pasar sin transiciones de un potente milongón (A los lejanos), a los acordes camarísticos de Catástrofe de la bailarina, del lirismo que propone el bandoneón en Junio a los obsesivos arpegios del piano en Mariposas. Puede haber un brillante solo de Marina en el tema que lleva su nombre o una bella melodía expresada por la flauta en Circe. Hay también chacareras, vidalas y bagualas y la participación de cantantes vocalizando los temas sobre los instrumentos, pero lo esencial de este muy atractivo debut es la coherencia musical que ofrece, a pesar de su diversidad. Un disco que abre grandes expectativas sobre futuros trabajos del grupo. Y si en algún lugar aparece anunciada una presentación de Marina Ruiz, sola o con este grupo, no dejen de ir a verla. No se van a arrepentir. Jorge García.

 

 

 

ELIANA SOSA. Sinergia tanguera. Edición independiente.

En varias ocasiones se ha señalado en este espacio la abundante cantidad de vocalistas femeninas, por cierto que de dispar calidad, que hoy ofrece el tango; hay que apresurarse a señalar que Eliana Sosa se encuentra entre las más destacadas. Cantante con una carrera ya bastante dilatada, a pesar de su juventud, se desempeña habitualmente con la Orquesta Misteriosa Buenos Aires (más abajo se comenta un disco de esta agrupación). En su primer trabajo como solista, Sosa potencia enormemente sus cualidades. Dueña de una perfecta afinación, un muy agradable timbre, excelente dicción y gran expresividad, aquí está acompañada por varios de los más brillantes músicos de la joven generación, como Ramiro Boero en bandoneón, Juan Pablo Gallardo en piano, Lucas Furno en violín y Pablo Motta, responsable de la mayoría de los muy buenos arreglos, en contrabajo, más la presencia de algunos invitados. La vocalista ofrece un repertorio integrado por varios tangos clásicos, un par de obras poco transitadas (Yo, Paciencia) y algún título contemporáneo (el desolado Sábanas vacías, de Juan Vattuone). Hay excelentes versiones de dos temas cargados de melancolía (Lo han visto con otra y Será una noche) y una muy ajustada interpretación de Patio mío, con el acompañamiento de las guitarras de los hermanos Torelli. Pero si tengo que elegir los momentos privilegiados del disco, los encuentro en las memorables versiones de dos temas tan escuchados como Trenzas y Desde el alma, en el primero solo acompañado por el piano de Gallardo y en el segundo únicamente con el contrabajo de Motta, ya que en ambos la voz de Eliana interactúa como un auténtico instrumento. Un muy buen debut de una cantante de grandes condiciones. Jorge García.

 

 

 

JULIAN HERMIDA QUINTETO. Zona Sur. YK 60223.

Posiblemente uno de los músicos más requeridos como acompañante y arreglador dentro del repertorio tanguero sea Julián Hermida. Con una prolongada trayectoria que incluye giras al interior y exterior del país y la participación en numerosos discos y conciertos, este notable guitarrista presenta su primer disco como líder junto a  un grupo de muy buenos músicos de la nueva generación como el bandoneonista Nicolás Enrich, el pianista Juan Pablo Gallardo, la violinista Myriam Gandarillas y el contrabajista Hernán Paglia más la presencia de varios invitados. Fusionando con sabiduría la tradición tanguera con arreglos frescos y creativos de temas clásicos, más un par de temas suyos, Hermida propone un muy interesante debut. Así se puede escuchar una melancólica versión de Ultimo tango en Buenos Aires, de Rubén Juárez y excelentes arreglos de temas tan transitados como Boedo, Organito de la tarde y el enjundioso A la guardia nueva, de Aníbal Troilo. Mención aparte merece la versión de La yumba, que escapa totalmente de las variables “puglieseanas”. Hay dos muy buenos títulos de Hermida, el vibrante Nené y el más complejo Gachuno, en este caso con destacada participación de Gandarillas y Franco Polimeni en el piano. Sur y Uno tienen buenos arreglos, pero la labor del cantante Daniel Garcés no excede la corrección. Mejor es la participación vocal de Alicia Vignola en Vuelvo al Sur. Un atractivo disco que confirma a Julián Hermida como un destacado instrumentista, arreglador y compositor. Jorge García.

 

 

 

CECILIA BONARDI CON PULSO CIUDADANO. Juglaría porteña. Edición independiente.

Tercer trabajo de este grupo que ha desarrollado su trabajo a lo largo de la última década abordando un repertorio que incluye tangos clásicos, música rioplatense y algunas baladas urbanas. Bonardi es una vocalista afinada y de adecuada expresividad, aunque sin ese plus adicional que le da a un cantante una personalidad definida y está acompañada por Martín Almada en guitarras, quien también está a cargo de los arreglos, Mariano Zambonini en bandoneón y flauta, Roberto Seitz en contrabajo y bajo eléctrico y Maxi Votta en percusión más algún ocasional invitado. Entre los temas clásicos se destacan las versiones de Toda mi vida, con muy buena participación de la guitarra, el excelente arreglo de Seitz para un dúo de voz y contrabajo en Niebla del riachuelo, una intimista versión de Soledad, donde la vocalista está solo acompañada por la guitarra y una expresiva interpretación del bello tema de Homero Manzi, Fruta amarga. Hay también consistentes interpretaciones de Barco quieto, de María Elena Walsh y A estos hombres tristes, de Luis Spinetta, una potente versión del candombe Pena mulata y un bonito tema instrumental de Almada, Más allá de tu mirada. Un sólido trabajo de Cecilia Bonardi con Pulso Ciudadano. Jorge García

ESTE DISCO SE PRESENTARA EL 13 DE JUNIO A LAS 21 HS. EN LOS 36 BILLARES, AV. DE MAYO 1265 Y EL 13 DE JULIO A LAS 21 HS. EN CIRCE FABRICA DE ARTE, AV. CORDOBA 4325.

 

 

 

ORQUESTA TIPICA MISTERIOSA BUENOS AIRES. Una noche en la milonga. Pat 306-218.

Dentro de amplio panorama de orquestas de tango surgidas en los últimos tiempos están aquellas que buscan transitar caminos de renovación, las que proponen un sonido derivado de otras formaciones y las que están estructuradas para bailar. Esta agrupación es una mezcla de las dos últimas variantes ya que ofrece un sonido claramente “disarliano” (en eso es original ante la proliferación de conjuntos de estilo “puglieseano”) y una clara vocación milonguera. Con arreglos y dirección de Javier Arias, también pianista de la agrupación, desarrolla aquí un repertorio compuesto por temas clásicos instrumentales y cantados y algunas obras del director del conjunto, entre las que resaltan EGB y Pinap. Dentro de los temas vocales, se destaca la participación de Eliana Sosa, quien ofrece muy buenas versiones de Una tarde cualquiera, Capullo de miel y Quien tiene tu amor. Menos relevantes son las intervenciones de los cantores Ariel Prat y Carlos Rossi, y el recitado de Tom Lupo en el tema Vanesa al Sur. Una orquesta que es posible que se potencie en sus actuaciones en vivo. Jorge García.

 

 

 

MARISA VAZQUEZ. Esa mujer/Buenos Aires Tango. Edición independiente.

Tal como lo venimos señalando en este espacio abundan en estos momentos las intérpretes femeninas de tango, algunas de ellas muy buenas, pero bastante más escasa es la presencia de vocalistas que, además, sean buenas compositoras. En el caso de Marisa Vázquez se cumplen ambos requisitos ya que es una cantante intensa y expresiva, y en este segundo trabajo se muestra también como una autora de gran nivel, con la peculiaridad, además, de que algunos de sus temas tienen un alto contenido social y político, un territorio no demasiado transitado por el tango, aunque haya algunas excepciones (Pan, Al pie de la Santa Cruz) a las que, no casualmente, se les modificó en su momento la letra. Acompañada por un conjunto liderado por el guitarrista Ramón Maschio, también encargado de los muy buenos arreglos, incluye la presencia de algunos invitados entre los que resalta el saxofonista Bernardo Baraj. Hay en el disco tres temas de repertorio, Patio mío, con una muy buena introducción del bandoneón de Rubén Slonimsky, Te llaman soledad, de Eladia Blázquez, solo acompañada por la guitarra de Maschio y La última grela, uno de los mejores logros de la dupla Piazzolla/Ferrer. Entre los nueve temas compuestos por Vázquez corresponde resaltar la desolada tristeza de Madrugada y soledad, el abierto compromiso de Por algo será, la melancolía de La piel de Buenos Aires, con una gran introducción de Baraj, el estilo campero de Mate lavado, donde está acompañada de un trío de guitarras y la potente denuncia de Sin pez ni pan. Un muy buen disco de una cantante destacable, tanto en el rol interpretativo como en el autoral. Jorge García.

 

 

 

LACRUZ/HELER/NIKITOFF. Aguafuertes tangueras. Edición independiente.

Las formaciones guitarrísticas dentro del tango tienden, en líneas generales, a ofrecer repertorios tradicionales, sin incursionar en terrenos novedosos. Este trío, integrado por Adrian Lacruz, Marcelo Heler y Leando Nikitoff propone, en cambio -además de originales y frescos arreglos de tangos clásicos- varias obras que los muestran como competentes compositores. Con una perfecta amalgama entre sus integrantes,  y un espíritu tanguero, perceptible desde la primera nota, el grupo brinda, entre los temas de repertorio, interesantes versiones de temas tan transitados como Don Juan y El pollo Ricardo, trasmiten adecuadamente la melancolía de Tristezas de la calle Corrientes y las complejidades armónicas de Revirado, de Astor Piazzola. A ellos deben sumarse los elaborados arreglos de Mimí Pinson y, sobre todo de Margarita Gauthier, el bello tema de Joaquín Mora. Entre las obras propias corresponde destacar A la gran Mezzetta, Actitud tanguera y la enjundiosa milonga La otra orilla. Un atractivo debut de un trío de guitarras al que habrá que seguir con atención en el futuro. Jorge García.

 

 

 

 

DOS NUEVOS REDUCTOS PARA ESCUCHAR JAZZ

Dicen las malas lenguas que el jazz es una música para minorías. Sin embargo ahora en Buenos Aires, que ya contaba con algunos antros tradicionales como Thelonious, Virasoro Bar y Notorious, más los inoxidables conciertos de los martes de Jazzología en el Centro Cultural San Martín, se han abierto dos nuevos espacios dedicados al género. El primero es Onyx Club, instalado donde funcionaba hasta hace poco el Teatro El Espejo, en el barrio de la Recoleta. Con funciones de miércoles a sábados (algunos días con dobles presentaciones y precios razonables), ofrece conciertos de artistas destacados en nuestro medio y otros menos conocidos, en busca de su consagración. El espacio es agradable, está muy bien puesto y necesita, como todo nuevo emprendimiento, instalarse en el conocimiento de los jazzeros locales. Su programación se puede consultar en (www.onyxclub.com.ar). El otro es BeBop Jazz Club, situado en el barrio de San Telmo. De una estructura más lujosa que el anterior y precios de los espectáculos y los comestibles bastante “salados”, parece estar pensado para el turismo y aficionados más o menos pudientes, con una programación centrada en algunos de los músicos de más renombre de la escena jazzística local. Aquí la programación se puede consultar en el facebook. En cualquier caso, para la inmensa minoría de jazzeros del país la presencia de estos dos nuevos espacios es una muy buena noticia. Jorge García.

 

 

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