Se estrenó la película de J.J. Abrams que comienza la tercera trilogía de La guerra de las galaxias y, como ya hicimos con Kryptonita, discutimos cinco razones en cinco oraciones, pero jamás sin corazones.
A Juan Pablo Martínez le gusta porque:
1- Abrams narra y filma bien, y El despertar de la fuerza es la mejor prueba de esto: la película no tiene nada que envidiarle a la trilogía original.
2- En todo momento se nota que Abrams ama este universo y estos personajes, pero es lo suficientemente buen cineasta como para lograr que esta no sea una película “de fanboy”.
3- Está Kasdan entre los guionistas y se nota. Los personajes nuevos logran estar a la altura de los clásicos.
4- La voz de Kylo Ren –saturada cual mezcla mono de película de los 70- es la cosa más aterradora del mundo.
5- La película no le escapa al humor, y el de Kylo Ren y los Stormtroopers (no vamos a spoilear) es el chiste del año.
A Federico Karstulovich no le gusta porque:
1- Pasaron 32 años, pero Episodio VII no se ve anacrónica, se ve oxidada, en automático.
2- Abrams hizo su película más impersonal a la fecha. Y cuando comenzás a encariñarte, se termina. Comienza tarde.
3- Episodio VII es menos una continuación que una remake.
4- Finn, Leia y Luke tienen fotogenia. Faltó ampliarlo al resto y ponerle un motor a Harrison Ford, desganado como nunca.
5- Exenta de humor, cuando cae en el costado dramático carece de peso: Está la carcasa, falta corazón, en serio.